"¿no es ?. Es"
En forma sucinta, previa al relato expondré algunos antecedentes. Eran los llamados años de plomo en Argentina. Aunque no lo conocíamos por ese nombre, luego se lo identificó como Plan Cóndor, al caer algunas dictaduras. Los ciudadanos de Argentina, Chile, Paraguay, Uruguay, y algunos países mas del cono sur estábamos sometidos a la doctrina de seguridad nacional que le otorgaba a las fuerzas armadas todo el poder de represión. En la plena guerra fria y bajo el pretexto de la lucha contra el comunismo y con la aparición de la revolución cubana, el movimiento guerrillero y sus variantes, foquismo, maoísmo, etc, se arrasaba el pensamiento, la cultura, la gente. Los pilares ideológicos fundamentales, una encendida defensa de una seudo libertad, la tradición, el estilo de vida cristiano. Era el mas horrendo oscurantismo. Con represión se aplicaron políticas económicas neoliberales. Apoderase de las riquezas de los países y de la gente. Con el advenimiento de las democracias en la década del 90 se profundizaron las políticas económicas bajo el manto de los acuerdos de Washington. Sus versiones modernas el Nafta y el Alca. En aquellos tiempos funcionaba en Panamá la llamada Escuela de las Américas, organizada y sostenida por EEUU. Allí se entrenaba a miembros de las fuerzas armadas latinoamericanas para reprimir, torturar, aplicar dicha doctrina. Infinidad de historias se vivieron grupal e individualmente, por y durante la represión. Ahora si les relataré una historia que me contó un profesional que me dijo: Algún día las cosas cambiarán. A vos que te gusta escribir hacelo sobre este tema. Agregale, cosa que hice, un poco de tu imaginación.
La identificación. Al joven argentino lo habían secuestrado, trasladado al Uruguay y asesinado en Montevideo, luego de largas sesiones de tortura. Su familia contactada con movimientos de derechos humanos pretendía encontrar su NN y repatriarlo. Luego de un largo tiempo de búsqueda lograron localizarlo, pero había que hacer los peritajes correspondientes. Un abogado de la organización se contactó con el profesional, quien a sabiendas de los riesgos ce correría aceptó la tarea. No habrá honorarios pero la familia pagara un viaje para 4 personas con corta estadía. Irían el con su esposa, el abogado con la suya. Las mujeres formaban parte de una farsa que jugarían al aceptar como buena la causa de la muerte del NN resultado de una enfermedad infecciosa, tal como lo decía el certificado de defunción de un hospital uruguayo. Haciendo de la identificación una tarea de rutina. Aunque en los hechos no era asi. Ellos, los represores sabían a lo que estaban jugando. Tenían todas las cartas y el poder en sus manos.
Aterrizaron en el aeropuerto de Carrasco en un vuelo de Aerolíneas Argentinas. El día era gris, triste, tristeza abonada por la misión a cumplir. Los esperaba una antigua limusina negra, de esas que en su interior, además de los clásicos asientos, para aumentar su capacidad tenia unos plegables llamados trasportines. Enfilaron directamente al centro de la ciudad y al medio día estaban entrando en la funeraria,.empresa encargada de trámites y demás tareas especificas. Dejaron allí el poco equipaje que llevaban. Acordaron lugar y hora de reencuentro con las esposas, quienes quedaron paseando y haciendo compras por la ciudad. Los dos se dirigieron al cementerio del Buceo en la misma limusina. Lo atravesaron hacia los fondos. En ese momento no había un limite ni paredón que separara el cementerio de las viviendas, de manera que las modestísimas tumbas se diluían como ola que llega a la playa, para luego, en un corto espacio aparecían casitas, ranchos, chicos jugando, gente tomando mate. La vida. Un par de "desenterradores" trabajaba en una fosa. Algunos uniformados, uno montado a caballo vigilaban y los vigilaban. El acuerdo tácito de la causa de la muerte tenia allí sus limites precisos. El olor era insoportable, pero los operarios dijeron que por suerte habían abierto la tumba en la víspera y ésta se había ventilado un poco. Era inimaginable cuanto podía oler un cadáver. Los dos trabajaban parados dentro de la fosa, a mano limpia, entre pitada y pitada de cigarrillos, iban depositando ordenadamente en un cajón-camilla los restos del NN. El jefe de los uniformados le dijo al montado "si aparece la noviecita con un ramo de flores me la corres". Se dirigieron a dependencias del cementerio y sobre una mesa camilla de mármol desplegaron los restos cual rompecabezas bien armado. El perito sacó datos antropométricos, del NN, midió, cotejó, comparó, examinó la dentadura con la ficha dental facilitada por el odontólogo. Allí mismo elaboro un informe, puso sus datos personales, lo firmó. Se hicieron copias. El NN tenía nombre y apellido. Se retiraron en el mismo automóvil, y al día siguiente regresaron a Buenos Aires. Tiempo después se enteraron que los restos estaban en Argentina. No era época para comentar lo que se hacia y en que se participaba. Eso si, muy discretamente la familia les hizo llegar su dolorido agradecimiento. Hoy, transcurrido tanto tiempo, alguno de esos actores ha muerto.
Chau y hasta la próxima.
* Cuentario. Todo aquello que tenga el carácter de relato aparacerá bajo el nombre de esta nueva sección. El nombre corresponde al título de un libro de cuentos que entre 4 autores publicamos en 1982, presentado en la Feria del Libro de ese año. Actualmente agotado .
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