"Tiempo, tiempo ¿porqué pasará tan rápido?"
Y llega el fin de año. Por supuesto no es ninguna novedad. Afirmaría que nos pasamos la vida contándolos en acción esporádica, que despierta en la conciencia su transcurrir. Nos proponemos el próximo llenos de buenas iniciativas, promesas que en general no cumpliremos y aunque lo iniciemos con ímpetu va camino de ir apagándose. Esto no quita nuestro disfrute en la planificación, la elaboración de dichos planes, el gusto por imaginarlos. Nos supondremos ser en parte otra persona, diferente de la que somos, gracias a la corrección autocrítica transitando un supuesto camino de perfección. Meditemos, aquellos cargados de largos años entramos en el 2013. Yo de chico fantaseaba con llegar al 2000 y si lo lograba pensaba en el 2010, el bicentenario del 25 de mayo de 1810. Esas dos metas ya las superé. Curioso el 2016 bicentenario de nuestra independencia no me seduce tanto. Quizá la vejez avanzada no constituya un aliciente para prolongarla tanto. Igual el deseo es que cada cual trate y logre lo que se proponga. Pero cuidado pues al elaborarlos nos sorprenderán en esa jornadas el día 28 de diciembre, el de los santos inocentes. Es probable, a repetición, todos los años cometamos las mismas inocentadas.
Chau y hasta la próxima
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