Nº 600 Otra vez palabras, frases y alguna historia corta.

 

"Pienso, luego existo" dijo el filósofo. Confirmado.
La cosa tenía un sentido. Lo perdió.
La quietud es la inquietud sosegada,La inquietud es la quietud dominada.
El canto del gallo es bíblico, no así el cacareo de la gallina.
Llora llora el urutaú y el yatay hace lo imposible por consolarlo.
Cuando estoy desvelado el sonido de dos campanadas del reloj, me parece una miseria.
Cuando toco un timbre me dan ganas de salir corriendo.
Añoranzas:Las veredas de baldosas a cuadritos y las de listones.Que pena, están desapareciendo.Los cordones hechos de piedra.La bosta de
los caballos sobre los adoquines. El ruido de los carros. Las voces de los vendedores ambulantes. La tranquilidad de las calles y las charlas
de los vecinos tomando el fresco. El juego de los chicos. El encendedor y apagador de las luces de la calle. El canillita. Los cuentos de
hadas, los de ratones, de piratas, los mosqueteros. A la lejana vida que pasó. Basta, me estoy poniendo nostálgico.
La pausa, un descanso en la prisa.
Era tanta la fe que tenía que murió de exceso de mística, lo peor, incrédulo.
La ciencia excesiva puede ser una manifestación de la ignorancia.
La esencia del clavo es su punta. Su inteligencia la cabeza.
En el tornillo la cabeza es su inteligencia,la ranura la clave para su movimiento. Su cuerpo la expresión de un genio.
La regla, un trocito del infinito.
El clip, el alambre doblado por un genio.
Paralelas, con la ilusión de encontrarse.
Infinito, lugar a donde nunca se llega.
En la galería de los positivos, yo. En la galería de los negativos, también.Me anoto en todas.
¡Cuidado! Humano suelto.
Historia corta: El rey, la banda de música, los niños.
El desfile pomposo. Con lujo, solemnidad y cierta estridencia visual y sonora. Detrás de la carroza real y del cortejo, una banda ejecutando
sones militares. El pueblo , la multitud cerraba espontáneamente el desfile. Alborotados y alborotadores iban desfilando los niños ignorando que portaban el germen que acabaría con la monarquía.
Algunas frases más.
Al ver lo que veo, miro para otro lado.
No me alcanzan los números para contar lo que está mal, y para lo que está bien.
Canto mi alegría, lloro mi tristeza. Lloro mi alegría, canto mi tristeza,
Se aprende a amar, dijo Freud. Mi aprendizaje es constante, pero me falta mucho para graduarme. Lástima que estoy al final de la vida.
Estoy expuesto a todo. Como no lo conozco, estoy expuesto a nada. Ya me llevaré la sorpresa.
Ayer es el pasado. Hoy el presente. Mañana pura incógnita.
Y te cuento lo incontable.¡No lo cuentes!.
Lápiz, la noche con tu uso te ha ido encogiendo. Lo siento, tendré que cambiarte.
Me quedo sin herramienta. Termino.

Chau y hasta la próxima.