Nº 825 La internet de las cosas.

 

"La realidad la inventamos nosotros".

No se me había ocurrido, acaso por ignorancia, desinformación. La imposibilidad de vivir un aggiornamiento tecnológico.Nadie está habituado suficientemente para ello.Porque a la información la sigue en algún momento la fantasía.Mas como se pueden imaginar, aplicaciones, usos,interacciones de tecnologías de las que tenemos como mucho los legos leves rumores.Las cosas entre ellas pueden interactuar, ordenarse, obedecerse.Nuestra realidad está compuesta por las cosas inanimadas. No solo compuesta físicamente sino también conformada.La tecnología con sus productos y contenidos, utilidad,la ha modificado.Nuestra existencia hoy está muy condicionada, dependiente.Pensemos en el uso de la compu, la fotografía, la televisión , las comunicaciones y un larguísimo etc..Todos ellos compuestos por cosas.Cuantos UFA dediqué a la importancia de los objetos inanimados.Como estuvieron incluidos en la memoria, las creencias religiosas, su conexión entre el pasado, el recuerdo, el deleite, el sufrimiento. Pero también aparece un problema semántico.¿Son objetos inanimados por el hecho de no tener vida?Cuanto de su composición será o es inteligencia artificial.Cuanto de otra forma de vida si se la puede llamar así.Te preguntarás y con razón a que vienen estas reflexiones.Pues a eso, a la ubicación de lo material, del uso que de ello hacemos.Porque en parte, de manera insospechada, en parte porque nos resultará imposible adelantarnos con certeza como se deslizará nuestra existencia en todas sus formas y matices. Cuando caducará, cuanto de lo nuevo será efímero y que otras formas amanecerán.Por la internet de las cosas  y  a ella¿que la sucederá y reemplazará?.Consciente o inconscientemente, en forma inexorable, la vida se irán  modificando, como lo muestra y enseña la historia. Los cambios pueden tardar en producirse y de introducirse;pero aparecidos adquieren una velocidad portentosa de desarrollo,o decretando en forma fulminante la caducidad de lo vigente.Pero no olvidar que el hombre seguirá construyendo un violín, una cuchara, un tenedor, un piano, un...

Pensalo y no te preocupes, es así.

Chau y hasta la próxima.

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