447. Nano historias II.

“Ocupate de tus bambalinas que yo me ocupo de las mías".

HABÍA UNA VEZ..Así empezaban los cuentos de nuestra infancia y terminaban con colorín colorado, este cuento se ha terminado. Mis lecturas de esa primera infancia se centraban en los Cuentos de Calleja, un español que supo editar muchísimos de distintos autores, mas los que un grupo de escritores contratados para su editorial que los terminaba con una frase de su autoría "y fueron felices y comieron perdices". A mis manos llegaban en libritos , como mini ediciones como publicidad de una bebida llamada Pomona. Si yo pusiera ahora HABIA UNA VEZ solamente, ¿te atreverías con tu memoria a evocar lo que leíste en tu primera infancia?. ¿Te gustaría?. Hacelo y terminalo con un colorín colorado.

Burladas: La mariposa marculinea rebeli busca afanosamente el hormiguero. Lo encuentra y deposita allí sus pupas. Ellas emiten un sonido igual al que emiten las hormigas reinas. Las obreras se vuelcan a cuidarlas, alimentarlas, engañadas no saben del futuro de sus desvelos. La mariposa crece sana y fuerte a salvo de sus enemigos naturales. Publicado por Mirmyca -shenkii. Revista Science.

El ascensor: La pareja llegó al antiguo edificio de departamentos donde vivían. Tomaron el ascensor y marcaron el último. Charlaron,se besaron, entraron en el vértigo de la pasión. Entregados a tal ímpetu se pasaron. Siguieron viaje.

Predispuesto: No tenía oficio definido pero era muy trabajador, voluntarioso. Donde veía una oportunidad se metía. Anunciaron la llegada de un circo y pedían ayudante de domador de fieras, y en particular de leones. Lo consiguió. Ahora pide limosna con el brazo que le queda.

Pecado: El sol del medio día calentaba a fuego las chapas de la casilla de la villa. Ella salió a buscar agua y dentro no se oía nada. Dentro no había nada. Es un decir porque un contenido tan miserable es más fácil calificarlo de inexistente. El silencio puede ser bueno o doloroso. La criatura, el bebe, no se movía. Podría estar durmiendo. Cuando nació , al poco tiempo al párroco de la villa lo trasladaron vaya uno a saber donde.

Una voz: La oyó cantar con esa hermosa voz entonando canciones y tangos a su ritmo, una cadencia propia de quien al mismo tiempo lava ropa manualmente en la pileta, fregándola en la tabla. Buscó una escalera, la apoyó en la pared lindera para regalarle un cesto de ciruelas. No había nadie. Todo estaba vacío y abandonado. Bajó de la escalera, salió a la calle, dió un cuarto de vuelta de manzana y se encontró con otro edificio, distinto al que habitaba la dueña de la voz. Volvió a su casa y tampoco la encontró. En su reemplazo un moderno edificio de departamentos con la misma numeración de la casa que acababa de abandonar.No pudo creerlo. En el reflejo de la puerta vidriada se vió niño, adulto, anciano. ¿qué hacía allí parado con esa cesta de ciruelas?.

Algo de Camus: Cuando llegado a París ya está ocupado por el ejército alemán y apunta en su cuaderno: París está muerto. El peligro ronda por todas partes. Uno corre hacia su casa a la espera  de la señal de alerta o algo así. Me detienen constantemente en la calle para pedirme mis documentos.¡Qué atmósfera encantadora!.

Mahler: El músico Gustav Mahler se entera que su esposa, Alma lo engaña con el arquitecto Walter Gropius. Lo consulta a Freud. Se encontraron en la ciudad holandesa de Leiden y caminaron cuatro horas. Hablaron de las relaciones amorosas y Freud lo culpó de pedirle a su mujer más joven que él se atara a su vida y que su complejo de Edipo lo llevara a buscar en cada una de ellas a su madre. Muerto Mahler a su albacea le llegó un recibo reclamándole 300 florines por una consulta de varias horas en agosto de 1907. (Del artículo escrito por Pablo Gianera en la Revista ADN de La Nación titulado El año de Mahler).

Chau y hasta la próxima.