330 El círculo imperfecto.

 

El Triunfo de la muerte, El Bosco.

Sigo con las imperfecciones y hoy abordo un nuevo tema. Pero antes haré algunas consideraciones .Me pregunto como clasifico y califico que es perfecto y aquello que es imperfecto.Habría que definir y categorizar la perfección, lo perfecto para luego comparar y en cotejo llegar a algún tipo de conclusión. Presumo solemos nosotros los humanos, los grandes creadores y en distintas actividades y disciplinas quienes imponemos reglas, leyes que apuntan a definir qué es la perfección. También se la incluye en modos de vida, los llamados caminos de perfección. Caminos en meta inalcanzable, mas cuyo esfuerzo por transitarla produce  un mejoramiento sustancial sobre uno mismo, siempre que el modelo elegido lo sea para esa perfección.  Además está la naturaleza con sus propias creaciones aunque somos nosotros los que decidimos la calificación y en ella entra en juego la relatividad y ella en sí misma modifica apreciaciones. Tampoco podemos confundir perfecto con exacto, aunque se rocen y en algunos casos la exactitud es condición necesaria de perfección.

Vuelvo al círculo que es siempre perfecto, o no es círculo. Lo imperfecto es una cuestión de visión.. Ni el trazo ni la forma geométrica en este caso imaginario se corresponden con la perfección y con la definición. Este círculo presenta cierta irregularidad en el grosor y cierta inseguridad en el trazo contribuyendo así sin artilugios de visión crítica a la percepción de una figura  que orilla lo imperfecto. La visión de la Luna en todo su esplendor es un círculo por su forma pero en detalle no lo es. Pienso en este tema que lo más importante en lugar de exigir lo perfecto o aceptar lo imperfecto es interpretar en cada caso su significado. Ese círculo imperfecto descripto como ejemplo presenta  la condición de un emblema. Muestra una tendencia por parte de quien lo trazó una concepción de su propia vida en acción transcurrida o a transcurrir por los caminos de una imperfección que lo tiene sin cuidado. Desinhibido de toda doctrina, viviendo en improvisación permanente, los resultados sin pulir en total indiferencia. Creyente en la espontaneidad libre, auténtica. De vida ni más ni menos feliz  que la de otros. El círculo imperfecto que rigió su vida un ejemplo palpable de como se puede vivir y también como se puede morir. Eso sí, al morir el círculo que se cierra es perfecto.

Chau y hasta la próxima.