Nº 788 El hombre con la carretilla.

 

"Recuerdo, recuerdo, recuerdo. El tiempo lo dispongo a mi manera, pero ignoro cuanto me queda todavía"

La oscuridad ya estaba rota de antemano.Un velador con lámpara incandescente aseguraba que la noche fuera más llevadera para los chicos que dormíamos en esa habitación.Siempre la oscuridad es en ellos motivo de miedo.Nosotros, de nosotros se trata, apostábamos nuestro valor , quien llegaba al fondo del jardín  cuando se apagaban las luces. Mal podríamos conciliar el sueño sin un foco encendido. A veces la lámpara mencionada  estaba sustituida por unas velitas llamadas Lepetit que duraban encendidas toda la noche.Su uso nada tenía que ver con cualquier acto litúrgico, ofrendas incluidas.

Así, en ese ambiente penumbroso volcábamos toda la ilusión acumulada al encender un proyector de cine. ¡Oh!, funcionando a kerosén.Con indisimulada ansiedad encendimos la lámpara a mecha.Colocamos una película simple y corta encastrada en el lugar correspondiente.Cual difusa imagen proyectada en el panel de una puerta, aparecía el hombre con una carretilla.Inútil accionar la manivela. La película corría en breve incursión  mas no producía, reflejaba el menor movimiento.Su presencia inmóvil nos llenaba de decepción y enojo.Insistíamos con repetidas e inútiles maniobras. No se trataba de un mal manejo, dada la sencillez primitiva del proyector sino de la premeditada ineficacia del juguete.Las sombras nacidas en su seno se limitaban a la inmóvil presencia nacida de sus entrañas.La habitación había perdido su magia previa a causa del fracaso.Allí, inmóvil el hombre con la carretilla cargó en su momento con nuestra ira, decepción sin sospechar ser parte de una pequeñísima  historia infantil que renace en el pensamiento, en la memoria de quien hoy añora, con verdadera nostalgia a ese hoy  maravilloso,recuerdo que me dice al oído nos queda poco tiempo para compararlo con el transcurrido, pocas oportunidades en tu vida, para que yo vuelva a revivir reapareciendo.Disfruta de este destello del ayer hoy.

Chau y hasta la próxima.