Aparece los miércoles y los sábados

"Dios me puso en tu pagina como un tábano sobre un noble caballo para picarlo y tenerlo despierto" (algo de Sócrates).

miércoles, 11 de agosto de 2010

335. Menos.

 

Piazza San Marco, Venecia, óleo de Salvador Serra.

"La imprecisión de los límites".

Sumar, restar, multiplicar, dividir. Estas cuatro operaciones que aprendimos en la escuela rigen acciones y hechos de nuestras vidas, y creo innecesario ejemplificarlas. . ¿Qué es lo que suma, multiplica, divide o resta en el vivir?. Para este caso en particular elijo hablar de la resta. Compuesta de un minuendo, nuestro pasado, un sustraendo, nuestra vida actual y un resultado. La prueba es sumar el resultado al sustraendo y debe dar el minuendo. Pero como la vida no es exacta ni matemática todo el conjunto está compuesto fundamentalmente por el subjetivismo. ¿Cómo se expresa esta operación?. En lo que uno puede hacer y hacía, la diferencia en los proyectos y el hallazgo de límites por momentos muy imprecisos, por momentos muy precisos.Y en esta búsqueda estaríamos sumando. Es la comprobación de lo que se podía y se puede por razones muy variables como edad, salud. El envejecimiento seguro recorta por lo menos en lo físico. La enfermedad puede más, acompaña muchas veces a la vejez, suma lo mental y además asume la responsabilidad aunque no siempre de la muerte. Mi resta es como un conteo lento o acelerado según las circunstancias. Debería observarla en forma imparcial. El concepto apunta a la percepción de lo menos y ese menos se manifiesta por momentos  con sutileza, en forma imperceptible, hasta ¡oh ! paradoja, es la suma de esos menos. Resultado un más menos con nuevas imposibilidades o exacerbadas dificultades antes apenas insinuadas. Menos, menos, menos o distinto si lo comparamos con el irreversible hecho biológico, sea este natural, patológico. No es fácil asumirlos, tomar conciencia de ello, replantearse el hoy-futuro. No resignarse y seguir en la medida de las posibilidades brindadas por esa nueva y prevista vida. Deben ser aprovechadas al máximo, dejar de lado toda resignación, descartar el pesimismo y evitar ser apresado por la depresión. La vida, ¡la vida! es hermosa, cruel, indiferente, plena, llena de matices bellísimos y espantosos. A ella  que se nos va escurriendo porque el menos es implacable, se la debe tomar respirando profundo, cual bocanada de aire vivificante, en metáfora sostener la respiración y expirar muy , pero muy lentamente ese aire-vida hasta que nada quede en los pulmones yertos.

Chau y hasta la próxima

No hay comentarios: