211 Borrador

 " El burro cargado, sabiamente camina lento.El burro sin carga también.¿será bueno llamarlo burro?". proverbio español.

Utilizo el término borrador para significar un bosquejo, un ensayo, el acto previo al texto. La acción definitiva más prolija, profunda, pensada, corregida, aunque decir definitiva es clausurar , cerrar un camino hacia otra posterior corrección o rectificación., una actitud excluyente no siempre racionalmente sana. Borrador lo utilizo pensando también en acciones y actitudes de nuestra vida. Es posible que en la reflexión o balance sobre el hacer y el pensar se nos introduzcan ideas tendientes al perfeccionamiento de lo ejecutado. La mayoría de las veces, por no decir siempre un cierto inconformismo nos invade para plantearnos que tal cosa la hubiéramos hecho de tal manera, mejor, distinta. Si se trata de una obra creativa ella afortunadamente podrá ser rehecha o modificada. Más difícil resulta, más doloroso también cuando nos referimos al decir, a emitir palabras que salen de nuestra boca para no regresar. Ellas, su corrección, requieren más de una vez de avergonzado cambio en mortificación interior. En el caso particular de Ufa reconozco, de allí contenidos y resultados  simples y a veces elementales bosquejos. Borradores  con el estigma de escasa corrección, de ligera relectura. Cuando me interno por los caminos internáuticos y hago mis visitas me doy cuenta de cosas que no debieron escribirse. De cosas que faltan, de cosas que sobran. De otro orden o de la intrascendencia del tema.. De cierto abuso en los encabezamientos, proverbios. En cierta metódica repetición. Pero claro hay que tener en cuenta y sin con ello pretender justificaciones que son la expresión de un estado de ánimo cambiante por momentos,de reacciones opinables sobre hechos o sucesos que impulsan o motivan tal reacción. De las limitaciones impuestas a quien los hace por escrito sin tener oficio para ello, estilo y talento suficientes, junto con lo acotado del medio.

Sin caer en conclusiones pesimistas pero sí en honduras realistas me aventuraría a sostener que por lo menos la mía, con sus aciertos y errores, sus castigos y recompensas y no me parece del todo mal, la mía repito ha sido una vida en borrador.

¿Y la tuya?

Chau y hasta la próxima.